Si pudieras estar a mi lado cuando ya no siento esas fuerzas para seguir avanzando, tras cada esfuerzo fallido, tras cada batalla sin final, tras esta guerra que de repente se vuelve mi vida, y no solo contara con aferrarme a ese recuerdo que me ha quedado grabado en un rincón secreto del laberinto sin salida que son mis recuerdos.
Si estos ojos se pudieran cruzar una vez mas con los tuyo para volver a descubrir en un segundo lo que es el secreto de la vida, si pudiera verme reflejada en tu mirada mientras sonríes con esa sonrisa que se me contagia y me hace brillar como la estrella mas luminosa de este firmamento oscuro que nunca logramos compartir pero que de alguna forma ambos nos volvimos parte de ese misterio nocturno, tras cada mirada que podía simplemente decir lo que es un sentimiento.
Quisiera mirar a mi derecha y verte sentado a mi lado, mientras susurras que siempre estarás protegiéndome y poder reclinar mi cabeza en tu hombro para susurrarte yo siempre protegeré de ti, mientras cierro esos ojos que no se cansaran jamás se soñar contigo.
unas letras bonitas, tristes pero bonitas. Y unos ojos preciosos :P jejej
ResponderEliminarun abrazo!
Al empezar a leer este susurro escrito, he pensado, "Si no lo dices en voz alta, quizá no pueda adivinar o que guardan tus deseos". Una vez, hace más de un año de esto, yo me encontré con una situación donde toda la comunicación eran mensajes ambiguos, pero ninguna palabra directa a los ojos. Y al final, todo acabó destruyéndose y hoy me alegro de aquello, porque creo que las cosas hay que decirles para el equilibrio bueno de los latidos. Di que quieres que cuando empieces una frase, la terminen, di qué quieras cuando posas una mirada en algo. Y así, no habrá dudas.
ResponderEliminarCreo que, sin embargo, este susurro es para tu ángel, con el que sólo puedes hablar con el pensamiento y el recuerdo. Con el que no puedes dejar de soñar. Y entonces, todo lo que he dicho arriba, ya no vale.
Lo entiendo como una carta escrita en un día donde cuesta ver la luz y el ánimo no ayuda a seguir adelante con mucha fuerza. Decirte que es temporal tampoco es consuelo, porque ya lo sabes, pero no crees en ello. Sólo queda entonces desear que camines por las sombras con la mayor tranquilidad posible.
Un abrazo grande, preciosa. Y que tengas un domingo lleno de luz y sonrisas pintadas en el cielo.