lunes, 1 de septiembre de 2014

Tristeza

Siento tristeza, aquella que la que te deja un amargo sabor en la boca, aquella que sientes un vació en el pecho, es aquella en la que estas sentado con la mirada perdida en el absoluto vació de la existencia.
Estoy triste, pero sonrió en vez de llorar, contesto que estoy bien en vez de decir que tengo el alma destruida y el corazón herido, camino en vez de buscar refugio de la tormenta que se esconde en mi interior,
Pero ¿por qué estoy triste? aun no lo sé, no sé porque quiero llorar, porque me siento herida, no he encontrado la respuesta en el vació del mundo, aunque se donde esta esa respuesta y no es allá afuera, si no acá dentro, dentro de mi, pero me da miedo ir a buscarla en esa soledad, en esa sequía que es mi interior, me da miedo pensar en mi, no quiero encontrarme con esa triste figura que escondí para ser fuerte.

2 comentarios:

  1. Gracias por tu visita, tu comentario y por seguirme. Yo también te sigo :)
    Tu entrada me ha gustado mucho, es muy sentida.
    Un saludo :)

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  2. Cuando la tristeza te abraza, sólo puedes dejar pasar el tiempo para hallar consuelo. Leo tu escrito y aparece la palabra "soledad". Y eso se soluciona con una palabra amable, con un café con las amigas o un batido, o un simple vaso de agua, pero escuchas una voz que te transmite algo y tu puedes expulsar la tristeza a través de tus palabras. Quizá, cuando os despidáis, vuelvas a sentir esa tristeza, ese vacío cruel que a veces la vida nos pone por delante y otras veces nosotros mismos nos dirigimos hacia él. Pero al menos, durante un rato, hemos vencido al vacío, a la tristeza y tendremos un recuerdo al que abrazarnos antes de dormir, cuando hayamos leído un poco del libro que nos acompañe en este momento o cuando hayamos escuchado las canciones que queramos.

    Es muy fácil dar consejos de que "no estés triste, no solucionas nada llorando, o ya se pasará". Eso no vale, en este momento, eso no vale. Y la energía vital se escapa mientras la tristeza la expulsa y nosotros nos convertimos en títeres en manos del vacío. Hay que ser muy fuerte para plantarle cara, y hay veces en que, por el motivo que sea, no lo somos.

    El texto tiene fuerza, Inori-Sam, es bello y dice muchas cosas sobre la desesperanza que ofrece la tristeza. Bien dices que hay que mirar el interior. Pero tú sabrás cuando es el momento. Todo esto queda muy bien reflejado en una historia tan bonita como triste.

    Un abrazo mi niña, y que tengas una tarde-noche llena de cosas bonitas.

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