Carta 31

Hoy te escribo una nueva carta tras 31 meses desde tu adiós, tras 31 meses de una herida que no sana, tras 31 meses deseando despertar un día y que tu aun estés en estas tierras.
Quiero contarte que hemos comenzado nuestro tercer años universitario (digo hemos porque siempre te llevo conmigo)  y bueno eso de define en que estamos cursando quinto semestre, la mitad de la carrera como ha pasado el tiempo,  volando hay momento en que me cuestiono en que no hago nada útil por el, pero seria injusto decir eso, porque si no hiciera algo útil no estaría en tercer año con todos mis ramos aprobados, no hubiera publicado el libro que te he dedicado y no tendría tan bonito el blog (que hasta ahora es mi pasaje de escapar la realidad y paradoja mente sentirme real), así que prefiero omitir el sentir de que el tiempo se va y nada se hace.
Bueno volviendo a lo que te contaba es un semestre nuevo que realmente se ve muy complejo y complicado, no se de donde podre obtener tan cerebro para aprender lo que necesito, pero de algo que estoy segura (y prefiero quedarme con ese pensar) que tu estarás hay siempre para iluminar mi mente, ser el pilar que me sostiene, espantar temores y dándome garras para continuar contra viento y mareas, puede ser uno de los semestre mas difícil de la carrera pero con tu compañía se que lo lograremos.
Bueno también quiero decirte en esa carta y aunque te lo he dicho siempre, que te quiero con todo el corazón, que te extraño todo los días y pienso en ti a cada instante, que me encantaría que estuvieras aquí, que pudieras vivir lo mismo que yo, pero que se que en el lugar donde estas ahora ya estas feliz, sin los problemas que nos agobian y bueno tú y yo sabemos algo que queda entre los dos y te lo vuelvo a reafirmar mi ángel querido.
Me despido dándote la bienvenida a nuestro nuevo semestre, que entre los dos conquistaremos, te quiero y te llevo por siempre ángel de mi corazón.